

Ese día empezamos a eso de las 10 de la mañana. Un poquito de nervios son normales, pero todo se arregla haciéndome amigo de quien quiere ser amigo. Se genera esa confianza tan agradable para todos, que se refleja en el resultado.
Aquí está Súper Julia. Feliz como una princesa, y toda una actriz. Como Alicia en el País de las Maravillas, concentrada con su brillante trabajo de modelo, paciente y sobretodo muy divertida.
Terminé muy contento, pues gracias a una buena conexión conseguimos variedad en el reportaje. Tal y como son los niños, a veces serios y a veces súper divertidos. En el ‘jardín de Alicia’ también nos reímos mucho correteando por allí:
Cuando se da la confianza a un niño, surge la magia. Se hace uno amigo enseguida, y el resultado de ello es una maravilla. Objetivo: captar la esencia que llevamos dentro.
Por último aquí tienes a Julia vistiendo su kimono y soñando con ser campeona del mundo de Judo, su deporte favorito. Un abrazo Julia, ha sido un placer!